Q86.00
PLANTAS SANAS Y HERMOSAS. 100% NATURAL Y EFECTIVO
Este plaguicida natural elimina parásitos, hongos y ácaros, tanto en jardines, como en interiores, combinando las propiedades del jabón potásico, del aceite de neem y de aceites esenciales. Es muy eficaz y su uso es sencillo y agradable. No contiene elementos tóxicos que puedan afectar a la salud.
En jardinería se puede utilizar sin restricciones porque, además de prevenir y combatir plagas, actúa como fertilizante. Elimina el pulgón, la cochinilla, la mosca blanca, los trips, hongos, ácaros, araña roja y otros insectos de cutícula blanda.
PROPIEDADES DE LOS COMPONENTES:
El jabón potásico es inocuo para las plantas y efectivo para numerosas plagas. No daña los tejidos de los vegetales y al degradarse acaba sirviendo de abono.
El aceite de neem tiene una mezcla tan compleja de componentes bioactivos, que dificulta enormemente a los insectos desarrollar una resistencia a este insecticida natural.
Aceites esenciales. Muchos estudios han demostrado la eficacia de algunos aceites esenciales para combatir plagas y ya se usan frecuentemente en agricultura ecológica. Eliminan los hongos, contienen componentes que combaten los insectos y son repelentes de los mismos.
PREPARACIÓN:
Ponga un litro de agua en un recipiente y añada 20 gramos de insecticida Ilumina. Remueva hasta lograr la total disolución. Puede ayudar poner el producto en un colador e ir disolviéndolo con una cuchara. Vierta la solución en una botella con spray.
MODO DE USO:
Se debe aplicar meticulosamente el producto por toda la superficie de la planta, sobre todo en la parte inferior de las hojas y en las partes en crecimiento, donde los tejidos son más tiernos.
El mejor momento para realizar el tratamiento será a la puesta del sol, en ausencia de viento y de lluvia.
Como método preventivo es suficiente una pulverización cada 7 o 10 días dependiendo de la cantidad de lluvias. Si intentamos controlar plagas ya presentes, será necesario fumigar cada 2 o 4 días hasta la completa eliminación de la plaga y después volver a la periodicidad normal. Si las plantas están muy afectadas se puede fumigar a diario, siempre observando cómo afecta a la planta. Serán convenientes varios tratamientos para controlar la plaga. Lo ideal es repetirlos entre 3 y 4 veces, dejando una semana de descanso entre ellos.
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